Uterus VesaliusIf every single image is significant, and through each one we can follow the trail of the different ideological contexts which produced them, precisely those with a scientific vocation, which are supposedly neutral, may become the most meaningful of all, because scientific knowledge is not an objective universe, and on many occasions it is used (consciously or unconsciously) to find arguments that justify and rationally legitimise a given society’s dominant prejudices. “In the obstetrician´s eyes” aims to show the fictions which have been created in scientific representations of the female body by western patriarchal societies, with the aim of questioning them and encouraging reflexion about the damaging legacies that still today continue to influence scientific thought as regards women’s bodies and psyches. The project is divided into 3 parts. (First Part: Uterus Vesalius) The greek scientist and thinker Galen developed the theory that the female reproductive system was an imperfect version of the male's genitals. As he described it, the eyes of the mole have the same structure as the eyes of other animals but in an imperfect way. Similarly, the female genitals are just an imperfect version of what they would have been if they had been externalized. This theory, which describes the female uterus as a kind of imperfect or inverted penis, was spread in the Western medical field over the centuries, and from Andreas Vesalius (1543) we can see the female genitals represented "scientifically" in this peculiar way, till the seventeenth century. Paradoxically Andreas based his study on an real dissection, but the prejudices of his epoch were stronger than the reality. An example that invites us to reflect on which conventions are influencing our own way of interpreting the world in the present. Si todas las imágenes son significantes y a través de ellas se puede llegar a rastrear los distintos contextos ideológicos que las generaron, precisamente aquellas con vocación científica y supuestamente neutral pueden acabar convirtiéndose en las más denotativas de todas, puesto que el conocimiento científico lejos de constituir un universo objetivo, en muchas ocasiones es utilizado (consciente o inconscientemente) para hallar argumentos que justifiquen y legitimen de forma “racional” los prejuicios de las mentalidades dominantes de una sociedad dada. Partiendo de este supuesto, el proyecto “La mirada del obstetra” pretende evidenciar las ficciones que han estado presentes, a lo largo de la historia, en las representaciones científicas del cuerpo femenino que han sido realizadas por las sociedades patriarcales occidentales, con el propósito de cuestionarlas y reflexionar sobre ellas y sobre las herencias nocivas que todavía hoy, por desgracia, siguen marcando el pensamiento científico en torno a los cuerpos y psiques de las mujeres. El proyecto está dividio en 3 partes. (Primera parte del proyecto: Uterus Vesalius). El pensador y científico griego Galeno desarrolló la teoría de que el aparato reproductor femenino, es en realidad una versión imperfecta del masculino. Tal y como él describía, los ojos del topo tienen la misma estructura que los ojos de otros animales a excepción de que no le permiten ver, no se abren, “ni sobresalen, sino que allí permanecen imperfectos.”. Del mismo modo, los genitales femeninos no se abren y quedan como una versión imperfecta de lo que hubieran sido si se hubieran exteriorizado. Esta teoría, que describe el utero femenino como una especie de pene imperfecto o invertido, será divulgada en el ámbito médico occidental a lo largo de los siglos, y a partir de Andreas Vesalius (1543) podremos ver los genitales femeninos representados “científicamente” de esta peculiar forma, llegando a encontrar este tipo de ilustraciones hasta bien entrado el siglo XVII. Paradógicamente Andreas se basó en la disección de un cuerpo real a la hora de realizar su estudio, pero los prejuicios de la época pesaron más que la realidad. Un ejemplo que nos invita a reflexionar sobre el peso que pueden llegar a tener los convencionalismos en nuestra interpretación del mundo.
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